martes, 21 de septiembre de 2010

Entrevista con una mosca

Esta mosca se presentó una de estas mañanas entre primaveral y veraniega. Y de buenas a primeras se coló en mi pieza.
Mi pieza no es muy amplia, pero sí lo suficiente para que entremos en ella una mosca y yo.
La pieza estaba en penumbra, como tienen que estar las piezas por las mañanas. Yo dormía, que es para lo que están hechas las mañanas.
La mosca pudo volar a su placer por la habitación, pero las moscas nunca se satisfacen si no molestan. En esto se parecen a muchas personas...

Antonio Diaz Cañabate

jajajaja!

miércoles, 18 de agosto de 2010

Terapéutica del hombre desligado

La palabra "compromiso" es políticamente incorrecta y ha sido progresivamente expulsada de nuestro discurso cotidiano. Un buen reflejo lo podemos encontrar en el arte. Es ya un lugar común de los guiones hollywoodenses que el personaje central sea un aventurero con buena estampa, de entre 35 y 40 años, acompañado por una veinteañera. En algún momento de la película, entre tiros y corridas de autos, el héroe se cruzará con un ex compañero de colegio. Este segundo personaje siempre tiene cara de agotamiento. La explicación: tiene una mujer gritona y descuidada, y un par de hijos que exigen dedicación sobrehumana. Su error vital fue formar una familia. Si no se hubiera comprometido, podría acompañar a la estrella en su raid aventurero y amoroso.
Otro reflejo se puede encontrar en la literatura. Por tomar un ejemplo, Juan Ranz, protagonista de la novela Corazón tan blanco , de Javier Marías, nos confiesa: "Cuando me casé, durante el mismo viaje de bodas tuve dos sensaciones desagradables, y aún me pregunto si la segunda fue y es sólo una fantasía, inventada o hallada para paliar la primera o para combatirla. Ese primer malestar es el que ya he mencionado, el que, por lo que uno oye, y por el tipo de bromas que se gastan a los que van a casarse, y por los muchos refranes negativistas que al respecto hay en mi lengua, debe ser común a todos los desposados (sobre todo a los hombres) en ese inicio de algo que incomprensiblemente se ve y se vive como el fin de ese algo. Ese malestar se resume en una frase muy aterradora, e ignoro qué harán los demás para sobreponerse a ella: «¿Y ahora qué?»".
Es posible encontrar en el arte reflejos de un aspecto de la época que transitamos: la identificación de todo compromiso en serio con los demás con la represión de impulsos vitales legítimos. La asunción de responsabilidades con los otros nos es presentada como una enfermedad. Vitalidad y autenticidad son asimiladas a la posibilidad de elegir, que es percibida como un fin en sí mismo.
Este deterioro de la idea de compromiso se manifestó paradigmáticamente en el pensamiento de Nietzsche. Como afirma el pensador español Jesús Ballesteros, su insistencia en la primacía del arte frente a la verdad, y, como consecuencia de ello, su propuesta de una "ética del olvido y del juego", lo conduce a proponer la exaltación de lo fugaz, lo transitorio, lo instantáneo, lo no duradero. "Por ello ve precisamente en el hombre como un ser capaz de prometer la mayor de las represiones, el fruto de la única verdadera violencia."
La actitud típicamente contemporánea es vivir el instante: el hombre de hoy no se encuentra obligado con su pasado ni con su futuro. Se considera libre respecto de todo lo que no sea el presente. Esto producirá diversas consecuencias: desprecio radical de todo el pensamiento anterior, despreocupación por el futuro del mundo, uso abusivo de la naturaleza. Y, sobre todo, será una de las claves para comprender la tristeza profunda del hombre moderno.
Un hombre que vive apegado al presente es un hombre desorientado (porque prescinde de la orientación que proviene del pasado, carece de memoria) y sin expectativas, sin proyectos (porque su cerrazón al futuro le impide toda conexión con su connatural trascendentalidad).
También en la pintura se refleja esta situación. Por un lado, expresa la perplejidad que genera en nosotros la deconstrucción de nuestra identidad, como se observa en el acrílico Rompecabezas (1968), de Jorge de la Vega, y, por otro, manifiesta la desolación que se sigue de ello, como creo adivinar en una de las tres versiones de la serie Siete últimas canciones (1986), de Guillermo Kuitca. En el primero de los cuadros mencionados se muestran cuatro rostros desesperados que miran hacia lugares distintos, como buscándose sin encontrarse, separados unos de otros por líneas gruesas que obstruyen la comunicación. En la obra de Kuitca, en cambio, se ve un hombre solitario en una habitación inmensa, con los brazos caídos, portando la desgracia de no tener más que la riqueza material que lo rodea.
La anulación de todo compromiso conduce a que rija lo que Freud ha denominado -en su obra Más allá del principio del placer - "imperio del principio de autodestrucción". Es que el hombre sólo se hace pleno mediante un despliegue de todas sus potencias. Apegado al presente y desligado de todo compromiso pierde la perspectiva de la realidad, y así se torna incapaz de comprenderla y amarla. Esto también fue puesto de relieve por Kierkegaard, que por eso propuso como modelo de persona al hombre casado, frente al donjuán, que encarna el esteticismo.
Para salir de esta situación debemos aprender a amar. Como ha sostenido Pedro Serna, se trata, en el fondo, de eso: no hemos aprendido a amar, a buscar la autorrealización, la propia felicidad, a través de la entrega de sí, de la apertura al otro. Aunque nuestra voluntad se encuentre incómoda en el amor de donación, en el sacrificio, aunque prefiera el cálculo, el do ut des , lo cierto es que "sólo el amor incondicionado puede superar la soledad, proporcionar la seguridad, la conciencia de ser querido por uno mismo, sin cláusulas de revisión? Lo único que puede devolvernos el paraíso perdido que andamos buscando dramáticamente es el amor incondicional, que no rehúye el sacrificio, que se refuerza en los momentos de debilidad, en las dificultades, y que se mira a sí mismo en el horizonte de la vida y de la muerte".
Ese amor sin condiciones es exigido por la formación de un hijo, que anhela ser querido por sus padres sin que importe si es el mejor o el peor alumno de su clase, el más lindo o el más feo. Y es la incondicionalidad que fundamenta la forma arquetípica de amor que se ha dado en Occidente: un compromiso de entrega total entre varón y mujer, un matrimonio que funda una familia. "Sólo una familia así fundada puede enseñar al hombre a amar de veras. Esa familia y ese modo de entender el matrimonio coinciden con la milenaria propuesta cristiana que veía en ellos el lugar natural del hombre, el mejor lugar para nacer y morir."

Juan Cianciardo
para LA NACION


©LA NACION
El autor es decano de la Facultad de Derecho de la Universidad Austral

jueves, 3 de junio de 2010

"Sobre héroes y tumbas"

Hoy, un posteo espectacular ideado por un amigo. ¡Gracias Cris!

El siguiente fragmento es del libro de Ernesto Sabato, conocido por muchas personas, "Sobre Heroes y Tumbas". Creo que esta parte del libro puede ser leída tanto dentro como fuera de él, ya que fuera del contexto puede apreciarse igualmente su reflexión. Espero que disfruten de la calidad descriptiva tanto como yo.

"No bastan los huesos y la carne para construir un rostro, y es por eso que es infinitamente menos físico que el cuerpo: está calificado por la mirada, por el rictus de la boca, por las arrugas, por todo ese conjunto de sutiles atributos con el que el alma se revela a través de la carne. Razón por la cual, en el instante mismo en que alguien muere, su cuerpo se transforma bruscamente en algo distinto, tan distinto como para que podamos decir "no parece la misma persona", no obstante tener los mismos huesos y la misma materia que un segundo antes de ese misterioso momento en que el alma se retira del cuerpo y en que éste queda tan muerto como queda una casa cuando se retiran para siempre los seres que la habitan y, sobre todo, que sufrieron y se amaron en ella. Pues no son las paredes, ni el techo, ni el piso lo que individualiza la casa sino esos seres que la viven con sus conversaciones, sus risas, con sus amores y odios; seres que impregnan la casa de algo inmaterial pero profundo, de algo tan poco material como es la sonrisa en un rostro".


Cris

sábado, 29 de mayo de 2010

True. True.

Te zarpás Annoying Orange!

miércoles, 31 de marzo de 2010

¿Cómo se llama ésto?

Un vestido con flores azules, una canción que se llama 60b, siete seguidores, una familia chiquita, esa persona y un montón de sudokus. Una foto pixelada, un reloj rojo, una Biblia gastada, un solo perfume caro; una alcancía con conejos, cinco anillos y un par de libros. Un pez blanco, mucha tarea, ocho cartas, nueve tarjetas y un baúl pintado. También hay cinco cuadernos, un papel con un número de celular y una billetera. No entiendo por qué veo estas cosas y me arden los ojos. Por favor, qué tonta.

miércoles, 3 de marzo de 2010

Débil


Una autora chilena escribió esto. Hoy, me gusta.

"Quisiera volver a aquel lugar, donde el alma es libre, donde se vive sin problemas, sin reproches. Aquel lugar donde los días rinden, donde uno es feliz a costa de la sonrisa y de la felicidad del otro. En ese lugar fui feliz, el recuerdo y el paisaje alumbraban mis días. Fue allá donde el sueño era suficiente, donde caminaba sin horizonte, sin barreras.
Pero, volver ahora sería drástico; simplemente, no puedo. Tengo que quedarme, conformarme con lo que me toca vivir y cargarme todas esas responsabilidades que llevan como dueño, mi nombre.
Tal vez, lo más conveniente ahora sería dejar de soñar y de buscar mi felicidad; tendría que vivir, como en aquel lugar, siendo feliz por la sonrisa del otro.
Si la felicidad entonces no me pertenece, te la regalo. Estoy cansada de perseguirla; hoy ya no me quedan fuerzas para alcanzarla.
Si se supone que este camino debe ser así, mi corazón es tuyo. En mis manos él no tiene valor.
[...] Ya no entiendo quién dice la verdad y quién está equivocado. No sé tampoco si hablamos el mismo idioma, porque evidentemente, no nos entendemos.
[...] Aprovechá el día de hoy; soy tuya y no tengo pretensiones. Hoy no me importás más que vos. Ganaste, estoy vencida."

viernes, 26 de febrero de 2010

Quote of the day

"When I exercise, I just feel good. I’m not a 6-foot-tall skinny model, and yes, I have cellulite, but I’m not going to apologize for my body. If you love your body, it will love you back. Confidence is beautiful." Hayden Penettiere


viernes, 19 de febrero de 2010

I'll be seeing you.

¿Qué hiciste amigo? Tenías todo por delante y desapareciste en un segundo. Me hubiera gustado que pienses en nosotros, en tus amigos, en todos a los que nos hacías felices y nos quedaba tanto por compartir. No entiendo cómo pudo pasar todo esto; solo quería que alguien me viniese a despertar y me diga que era todo una pesadilla.
Pero en realidad no quiero reprocharte nada, solo quiero agradecerte por todos los días y momentos que pasamos juntos; por cómo te comprometías y por cómo siempre me sacabas una sonrisa con tus pavadas o tus dibujos. Voy a extrañar mucho tus mensajes, tus cargadas, y la forma en que me decías "cachetes" y me hacías enojar tanto.
Fue tu decisión y la respeto. Pero ojalá, y te pido perdón, hubiera perseverado más e insistido en que conozcas a mi mismo Dios.
Ya te extraño amigo. Necesito escucharte reir, que me des un abrazo y que cantemos juntos. Gracias por todo lo lindo que me diste, por los recuerdos que me dejaste. Me vas a hacer mucha falta Tomás.
Te voy a querer siempre.
Nos vemos Tomy.









miércoles, 17 de febrero de 2010

viernes, 15 de enero de 2010

Feliz.

Y finalmente me di cuenta de que es así, tal como Arjona dice: “… será quizás porque no hay nada como la mala y triste vida para este oficio extraño de autor”. Y yo no seré autora, pero no me sale escribir cuando soy feliz. No salen más que palabras cursis, sin sentido, hasta graciosas y que dan asco. Y eso es lo que estoy haciendo ahora: escribiendo cosas que no me gustan. ¿Por qué? Porque estoy feliz, porque tengo todo lo necesario y mucho más, porque últimamente mi cabeza está funcionando lo suficientemente bien como para no andar arrepintiéndome todo el tiempo de lo que hago; si no al contrario, quisiera repetir muchas cosas que viví. Pero sé también que lo bueno dura poco, menos a mí, así que mejor ir aprovechándolo. Si escribo esto es porque disfruto de la acción y porque me lo pidieron: va a haber al menos una persona que lo lea, y qué más quiere alguien al que le gusta escribir que se lo pidan que lo haga: que siga escribiendo pavadas.
Este 2010 viene cargadito. Trae responsabilidades pero también muchas y buenas expectativas. Lo empecé de la mejor manera: de campamento con Power. Y si una lágrima se está asomando es por lo increíble que fue y por todo lo que viví. Me pude dar cuenta una vez más lo espectacular que es estar dispuesto a dar y no a recibir; porque al fin y al cabo terminas recibiendo mucho, mucho más. Conociéndome, nunca pensé que alguien podía llegar a agradecerme algo, y sin embargo, mi alegría hizo ese milagro posible. Me ayudaron y pude ayudar. Y me di cuenta también de que lo que dicen es cierto: “el primer hijo es de Dios”, y la verdad es que yo no puedo vivir sin él. Y se viene Block, y capaz que las tantas ganas de pasar se convirtieron en querer quedarme un ratito más con Power.
En 15 días empiezo la universidad y eso es un horror; cómo pasa el tiempo changos. Pero ahora estoy de vacaciones, en unas horas me voy al mar y mi agenda, que se llama igual que yo, todavía está vacía.
Espero mucho de este año, pero soy bastante realista. Mis sentidos por momentos se duermen, pero me comprometo a intentar ver, oír y hablar de la mejor manera posible; quiero seguir en esta carrera difícil pero hermosa, rodeada de la gente que tanto amo. Y es esa misma gente la que no me permite estar angustiada o preocupada por mucho rato, la que siempre está cerca y tiene algo para decirme y consolarme y lo que es más, sorprenderme. Gracias por hacerme tan feliz y por bancarme siempre, siempre.
Y feliz 2010 para todos. Nos vemos, no sé si tan pronto porque no creo tener en estos 15 días la mínima angustia o inspiración como para que me salga al menos una frase coherente que aporte algo al blog. Si me lo piden lo intentaré. Ojalá Santa Clara se porte bien, el clima no me defraude y la compañía siga siendo tan perfecta como hasta ahora. Sin más me despido. Hasta la vuelta!

martes, 12 de enero de 2010

Empecemos sonriéndole a los demás

No te metás, me quiero salvar yo, que haga lo que quiera mientras no me moleste a mí.
Son algunas frases que escuchamos, lamentablemente, cada vez más. Vivimos en una sociedad extremadamente individualista, en la cual lo único que importa es que yo esté bien. Si quienes me rodean tienen dificultades, es un problema de ellos. Yo, por mi parte, sigo avanzando en mi vertiginosa carrera hacia el “éxito”.
Pobreza, desamparo, desinterés por el otro, falta de compromiso son algunos de los síntomas que está manifestando esta sociedad enferma y en riesgo de muerte.
¿Cuánto hace que no te detenés a ver a tu alrededor? Por las calles sólo se ve a gente que camina con la mirada hacia el piso y con sus MP3 en los oídos. Somos ciegos, somos sordos. No tenemos la capacidad de darnos cuenta de que hay un mundo fuera de nuestro propio universo.
Somos islas. Cada uno hace lo que cree que puede beneficiarlo, sin importar si eso significa destruir a otras personas. Lo único que interesa es el bienestar y la felicidad personales.
¡Qué sociedad mediocre y triste! Nadie se da cuenta de lo hermoso que es abrir el corazón al otro, lo maravilloso de recibir un “gracias por tu ayuda”, lo sensacional de crecer juntos.
Comenzamos un nuevo año. Siempre hacemos balances para tratar de mejorar en el futuro. Seguramente, nunca te pusiste a pensar en esto.
Te propongo algo: que este 2010 sea un año en el que te saqués la venda de los ojos y los tapones de las orejas. Mirá a tu alrededor, escuchá. Date cuenta de que hay personas que te necesitan y que vos también necesitás de ellas.
Sé que es difícil, a mí me cuesta mucho. Pero este año me propuse este desafío,
¿me acompañás?

L’ Énigmatique Commentateur